Como todas las economías, Perú se vio muy afectado por la pandemia, pero su situación económica ha mejorado progresivamente desde finales de 2021, con un crecimiento del 2,7% en 2022 y una previsión de crecimiento del 4,5% en 2023. Aparte de su crecimiento económico, Perú también tiene uno de los ratios de deuda a PIB más bajos de América Latina, con una deuda que representaba el 34,4% de su PIB en septiembre de 2022.
Dada su geografía diversa y rica en recursos, Perú está repleto de oportunidades agrícolas e industriales; de hecho, el sector industrial aporta alrededor del 30,4% del PIB y el sector agrícola constituye aproximadamente el 7,5% del PIB del país, empleando al 27,3% de la población. En particular, Perú es famoso por la minería; es el primer productor de plata del mundo, pero también se centra en la extracción de cobre y oro, así como de gas natural, petróleo, textiles y procesamiento de alimentos.
Perú tiene una larga historia de producción de prendas de alta calidad que le ha valido el reconocimiento internacional; la industria textil, en particular, es conocida por sus materiales de alta calidad como: algodón (Pima y Tanguis); fibras de vicuñas y alpacas y fibras artificiales utilizadas para confeccionar prendas y tejidos. Dentro de la industria textil hay más de 45.000 empresas, que generan más de 2,1 millones en importaciones y 1,4 millones en exportaciones al año; es esta presencia internacional en el mercado textil mundial lo que ha permitido a la industria textil recuperarse de los impactos de la pandemia porque los inversores internacionales siguen buscando en Perú proveedores que puedan satisfacer sus necesidades.
Como Perú es tan rico en recursos, muchas empresas se benefician de la integración vertical; es decir, controlan toda la cadena de suministro, lo que es importante para Perú porque significa que pueden producir para grandes multinacionales como Lacoste, Ralph Lauren, Nike y otras.
Gracias a su ubicación, a la ausencia de aranceles y a su acuerdo comercial con Perú (USPTA), Estados Unidos es el principal destino de los textiles peruanos, con algo menos del 70% de los envíos totales. También hay una gran demanda de equipos de protección, toallas y ropa de cama para hospitales; se espera que esta industria sustituya en Perú a los proveedores chinos, que no pueden suministrar productos de la misma calidad que los peruanos.
Está claro que Perú tiene una industria textil pujante junto con su presencia minera mundial. De cara a una economía mundial post covid, Perú debería seguir siendo un actor importante en estas dos industrias.
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